Se trata de una propuesta con base territorial donde se propone generar espacios de difusión y encuentro de las personas viejas en tanto sujetos actores de la vida colectiva en sus barrios; pretendiendo recuperar el “saber hacer” y las experiencias de apoyo a la comunidad de los grupos de personas viejas en el contexto de la pandemia y sus consecuencias. Al mismo tiempo se abordaran los cuidados frente a la COVID-19 y la deconstrucción del viejismo, en el imaginario de los sujetos convocados.
A partir de la irrupción de la crisis sanitaria provocada por el covid-19 en nuestro país se apeló al aislamiento de las personas mayores en tanto fueron consignadas como población de riesgo. Se apeló al aislamiento físico y social voluntario de la población con énfasis en la población mayor de 65 años. En ese contexto muchas personas mayores vivieron situaciones de aislamiento y distanciamiento, presentando dificultades para la realización de tareas rutinarias-cotidianas como el realizar compras o la atención de necesidades primarias.
Las acciones encomendadas desde el aparato público, supuso una ampliación de los marcos de tutelaje y fragilización de las personas viejas, quedando alojadas cómo sujetos vulnerables por su condición de edad. Como consecuencia y en paralelo al avance de la pandemia se produjo un empobrecimiento de grandes sectores de la población provocando en muchísimos casos que las personas tuvieran que apelar a soluciones comunitarias para la provisión de la alimentación propia y familiar. Fueron (son) muchas las iniciativas, entre ellas la re-edición de las ollas populares, merenderos, entre otras. En este horizonte complejo de respuestas comunitarias a la crisis muchas personas mayores son (fueron) protagonistas. A su vez, se dan propuestas de apoyo a partir de grupos de viejos que continuaron en contacto y propusieron actividades para enfrentar el aislamiento. Asimismo, estudiantes y docentes tanto en el marco de las propuestas académicas como de extensión formaron parte o apoyaron estas iniciativas. Esta proposición expositiva implica el mapeo de las iniciativas, acciones y emprendimientos protagonizados por personas viejas y por referentes del área.
Apuntando a producir información sobre el rol de las personas viejas en la comunidad y aportando a promover un entramado dialógico que dé cuenta de sus saberes- conocimientos, brindando visibilidad a estos procesos, con la intención de fomentar insumos que habiliten a enfrentar el viejismo. El grupo de trabajo involucra a docentes, egresados y estudiantes. El trabajo en los territorios será llevado a cabo por estudiantes en el marco de sus prácticas preprofesionales, acompañados por los docentes, a quienes se les acreditarán las actividades. Asimismo se prevé el aporte de estudiantes que están en proceso de tesis sobre la temática que apoyarán en el marco de sus investigaciones.